sábado, 3 de enero de 2015

Cómo darle una dosis de efectividad a tus planes cuando lo necesites

Cuando comienza un nuevo año muchos no podemos evitar proyectarnos y pensar qué cosas nos gustaría conseguir en los 365 días que tenemos por delante. Nos gustan los comienzos, y aunque solemos preferir los marcados por el calendario, cualquier día es bueno para empezar.

Pero también es cierto que no es TAN fácil empezar. Aún cuando sentimos que estamos atravesando por un buen momento en nuestras vidas, a la hora de la hora nos falta motivación, tenemos miedo o simplemente nos da pereza y lo dejamos para el próximo lunes. Pues vamos a ponerle una trampa al miedo, vamos a despertar nuestra motivación y le vamos a echar agua fría a la pereza con lo que te voy a contar.


Se trata de un método para diseñar planes.  Fred Luthans y compañía diseñaron varios ejercicios basándose en la literatura previa, tanto teórica como aplicada, y estudiaron el efecto que tenían en:
  • la confianza en nuestras propias habilidades para tener éxito, o lo que en una palabra es la eficacia.
  • la esperanza, para ser perseverante al luchar por alcanzar nuestras metas y, de ser necesario, modificar la estrategia,
  • la resiliencia, que es la capacidad de reaccionar ante los problemas y adversidades y salir fortificado de ellos para conseguir el éxito
  • y el optimismo realista, que consiste en esperar que nuestros esfuerzos den los resultados deseados, teniendo presente dónde inician y acaban las consecuencias de nuestros actos y, por lo tanto, evitando cargar con la culpa de cosas que están fuera de nuestro control.
Y los resultados del estudio les dieron la razón. Las 4 características se vieron incrementadas significativamente en los participantes.  Entonces, cuando necesites idear un plan para alguna meta que te plantees, ya sea relacionado con el trabajo, los estudios, emprender un proyecto, escribir un blog, ir al gimnasio, dejar de fumar, etc., ten en cuenta los siguientes puntos:

1. Identifica un objetivo personalmente valioso de la forma más concreta posible.
2. identifica submetas, como si fuesen hitos por los que tienes que pasar para llegar a la meta final (¡porque las pequeñas victorias claro que cuentan!)
3. Ahora piensa y escribe distintas maneras de llegar a las submetas o a la meta final.
4. Considera los recursos que necesitas para cada ruta
5. Descarta las rutas que no sean realistas.
6.  Haz una lista de los recursos con los que cuentas, ya sean de tu personalidad, habilidades, como personas a las que puedas recurrir cuando necesites ayuda.
7. Piensa y escribe los posibles obstáculos que puedas encontrar y cómo reaccionarías a ellos.
8. Llama a uno o varios amigos o familiares, cuéntales tu plan y hagan un brainstorming sobre otras rutas alternativas, obstáculos y recursos que no habías considerado.
9. Incluye un cronograma o programa.

Las sesiones que formaron parte de los estudios fueron guiadas de manera tal que los participantes pudieran reconocer sus pensamientos negativos.  Pero a pesar de que no cuentes con un coach, psicólogo o guía a tu lado al diseñar tu plan, tener estos puntos en cuenta aumenta su efectividad.  Los autores explican que el dividir la meta en submetas aumenta la sensación de control y marca las pequeñas (o no tan pequeñas) victorias que a veces pasan desapercibidas; generar múltiples rutas ayuda a reaccionar ante las adversidades y evitar el bloqueo, es como contar con un as bajo la manga; y anticiparse a los problemas reduce el pesimismo ya que cuentas con planes para afrontarlos.

Te dejo con dos reflexiones de Albert Bandura, uno de los más grandes psicólogos que han existido y que lleva 50 años estudiando, entre otras cosas, la autoeficacia:


"A menos que las personas crean que pueden producir resultados deseados y evitar los indeseados mediante sus acciones, tendrán poca motivación para actuar o perseverar frente a las dificultades."

"Creer en uno mismo no necesariamente asegura el éxito, pero no creer en uno mismo sin duda lleva al fracaso."


 De más está decir que si tienes alguna duda o pregunta, ¡estás muy invitado a dejarme un comentario!  

¡Feliz 2015! ¡que esté lleno de buenos comienzos!


Referencias:
Luthans, F., Avey, J., Avolio, B., Norman, S. & Combs, G. (2006) Psychological capital development: toward a micro-intervention. Journal of Organizational Behaviour, 27, 387-393. Doi: 10.1002/job.373

Luthans, F., Avey, J., Avolio, B. & Peterson. S (2010). The development and resulting performance impact of positive psychological capital. Human resource development quarterly, 21(1), 41-67. Doi: 10.1002/hrdq.20034

miércoles, 22 de octubre de 2014

Andábamos sin buscarnos pero sabiendo que andábamos para encontrarnos

Sobre cómo llegué a la Psicología positiva (o ella llegó a mí).


Siempre quise estudiar Psicología porque me parecía la mejor manera de ayudar a las personas. "Paz mental, paz mundial" siempre ha sido mi motto, así que decidí rebelarme, dejar Derecho y empezar a estudiar la psykhé.

La carrera me encantó desde que mi primer profesor dijo la primera palabra. Y me pasaba que cosa que estudiaba, cosa a la que me quería dedicar. Psicología infantil, "porque yo de niña fui al psicólogo y me ayudó un montón y quiero devolver lo que recibí"; clínica "para tratar casos de estrés, porque, la verdad, no me siento lo suficientemente fuerte para tratar una depresión, ¡soy capaz de ponerme a llorar con el paciente!"; social, ¡oh! social... Hasta que en cuarto de carrera dije "esta es".

En cuarto llevé "Desarrollo y formación del personal" y "Dirección de Recursos humanos" con el profesor David Aguado (mil gracias, profe). Aprendí muchísimo, sobre todo me quedó grabada la máxima de sus clases: el bienestar del trabajador siempre es primero. Para mí, que siempre había rechazado dedicarme a cualquier cosa relacionada con lo laboral, fue como ver la luz.
Hace un año, octubre 2013, llegaba el momento que había esperado desde que empecé la carrera: el practicum. ¡Finalmente podré ver el mundo laboral real! Pues no. El 8 de octubre traje al mundo al amor de mi vida y, como en la facultad habían eliminado la opción de hacer el practicum en el segundo cuatrimestre, me veía obligada a hacer el practicum de investigación. Escogí la plaza en Salud laboral y recursos personales con Eva Garrosa, magnífica tutora, y me metí a ello. No me quedaba otra. Pero ¿conoces la frase "todo pasa por algo bueno"? Se dio tal cual.

Razones tenía para estar estresada. Trabajar casi a tiempo completo, aprobar las 5 últimas asignaturas de la carrera, el practicum, el baby... y yo soy de las que sufre de migrañas por estrés.  Y esperaba muchas.  Sin embargo, sucedió lo que menos me esperé.  No recuerdo cuándo, cómo ni dónde, sólo recuerdo que me enamoré de la psicología positiva. De pronto, me vi experimentando el flow.  Ver las dificultades como retos en vez de como problemas, disfrutar el momento presente, trabajar fortalezas como la resiliencia, el optimismo, la autoeficacia y la esperanza... Yo misma empecé a aplicar lo que aprendía en mi día a día y a pesar de que esos 6 meses han sido el mayor reto que he tenido en toda mi vida, sólo tuve una o dos migrañas. Terminé basando mi trabajo en la Psicologia positiva y se llamó Programa de desarrollo de capital psicológico y mejora de recursos organizacionales en restaurantes independientes.



Me licencié. Tuve unas maravillosas vacaciones en Lima con toda mi familia y un road trip por Perú con mi amado esposo, quien renunció a todo para apoyarme al máximo esos 6 meses.  Actualmente estoy haciendo los siguientes MOOCs:
- Habilidades y competencias a través del coaching personal (Universidad de Cantabria)
- Mindfulness para regular las emociones - Programa inteligencia emocional plena (Universidad de Málaga)
- The science of happiness - Positive Psychology (University of California- Berkeley)
Y a fin de mes empiezo el posgrado Especialización en Psicología Positiva Aplicada, dirigido por Marisa Salanova en la Universitat Jaume I. ¡Qué ganas!


Espero de corazón que lo que comparta en este blog sea de utilidad para muchos. Confío en la Psicología y en la Psicología positiva porque yo misma lo he experimentado y lo sigo experimentando y sé que puedo poner mi granito de arena en mejorar la calidad de vida de las personas


Bienvenidos todos!!